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Familias desesperadas y tutelas administrativas

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Familias desesperadas por la arbitrariedad en las tutelas administrativas.

Estas familias se manifiestan y soportan una lucha sin cuartel para recuperar la custodia de sus hijas e hijos. Reclaman la necesidad de que haya una buena investigación y jueces detrás de cada caso.

Afectados y asociaciones señalan que muchos de los centros de menores son privados y reciben por cada tutelado entre 4000€ y 9000€. Reclaman que, si ese dinero se invirtiera en familias con problemas económicos, se evitaría esa separación tan traumática para todos. Los procesos judiciales para recuperar las custodias, en demasiadas ocasiones, no son asumibles para las familias perjudicadas.

Manifiestan que es imprescindible el escuchar a estas familias.

Cinco Relatos

Todas los afectados que quieren recuperar a los hijos están en un sin vivir constante. Las noches se les hacen eternas y llenas de angustia por no saber cómo se encontrarán los pequeños, incluso dónde y en manos de quién estarán.

Mujeres en esta situación, no se atreven ni a explicarlo al mundo de forma anónima por la ansiedad y el miedo a poder ser reconocidas. 

Me llegan muchas narrativas más, que se les tendría que ir dando espacios.

  • Mujer con un ingreso mínimo de 532€/mes y cinco hijos a su cargo. Disponía de una vivienda social de Bankia. Se ausenta del piso cinco días y al llegar se lo encuentra okupado de forma ilegal. Acude a la Policía Nacional y estos, en lugar de ampararla, le dicen que ha de hablar con los propietarios, Bankia.

Ella envía e-mails a Bankia para informar de la situación.

En esos días el padre de los menores, del que se separó por violencia machista, la agrede. Interpone denuncia y, con la esperanza de recibir ayuda, acude a la Seguridad Social. Son trasladados a una casa de acogida.

Habiendo precedentes contra el agresor, se le deniega una orden de alejamiento. Debido a esa resolución judicial, le informan que no pueden continuar en la casa de acogida. Ella acude a la SS.SS. y la única solución que le ofrecen, al no poder acudir a algún familiar que los ampare, es guarda voluntaria o tutela de los menores. Accede a la guarda voluntaria y los pequeños son llevados a un centro de menores. En ese momento empieza su mayor calvario tanto para poder ver a sus hijos como para recuperarlos.

Separan a los hermanos y a dos de ellos los derivan a acogimiento familiar sin avisarla. Ella no sabe si podrá verlos o llamarlos.

Vía crucis que empieza en el año 2017 y a día de hoy no tiene solución.

  • Yasmin tiene dos hijos. El mayor es de una relación de maltrato y abandono. Al padre de la segunda hija lo ha de denunciado por ejercer violencia hacia el hijo mayor y hacia ella. En el juicio intervienen los Equipos Especializados de Atención a la Infancia y Adolescencia (EAIA). Ella es la única figura de referencia para ambos menores y no entiende por qué es a la que se le hace un proceso de seguimiento, en lugar de darle apoyo y ayuda.

Yasmin, a pesar de los muy limitados recursos de los que dispone, hace todo lo necesario para proteger y tener atendidos a sus hijos. Desde el EAIA consideran que tiene abandonados a los pequeños, por el hecho de pedir ayuda al entorno para que recojan a los niños del colegio. La conciliación laboral y familiar no es posible y no es algo que valoran.

Yasmin ha de acudir a reuniones con la EAIA y sale de cada una con ataques de ansiedad por cómo es tratada. En dichas reuniones le proponen un «plan de mejora». Ha de acudir a terapia psicológica y coincide con su horario laboral, que no tienen en cuenta. Para que pueda cumplir con la terapia, le proponen que deje de trabajar y pida ayudas económicas. Ella prefiere trabajar y no depender de dichas prestaciones.

Por trabajo, ha de desplazarse de Barcelona a Tarragona y lo pone en conocimiento del padre de la niña, no olvidemos que es el agresor de su hijo y de ella. Él lo aprovecha para denunciarla, como si ella no le hubiera informado. La EAIA le hace un informe desfavorable y alegan información que Yasmin puede corroborar no es veraz.

Desde EAIA, en lugar de ayudarla, informan a Yasmin que le quitan a sus hijos y deciden que los van a llevar de acogida con los respectivos abuelos paternos. Esto a ella la termina de destruir mucho más y provoca que su situación personal empeore. Se arma de fuerzas y vuelve a Barcelona para estar más cerca de sus hijos y verlos cada 15 días y con pernoctas de viernes a domingo. Esto cambia y las visitas las reducen a solo un sábado cada 15 día y cuatro horas, lo que la hunde más. Yasmin ve que esto provoca una clara desvinculación materno-filial.

Ella lucha por lograr primero las pernoctas de viernes a domingo cada 15 días, para luego recuperar la custodia de sus hijos.

Yasmin está desesperada ya que desde EAIA no han valorado las pruebas que muestran que el padre del hijo es un maltratador y los abandonó y el padre de la hija, con largos antecedentes penales, está con la pequeña de apenas 5 añitos.

  • Nita, es la madre de Lucía y Alejandro. Ella cuenta que los abuelos paternos la denunciaron con falsas acusaciones de desamparo hacia los pequeños, tanto a ella como al padre e hijo de los denunciantes.

Esto logró que los abuelos se conviertan en la familia de acogida. Nita denuncia que desde que los pequeños están allí sufren de ansiedad. Duermen en una misma cama y no reciben atención. Ha provocado que los críos pierdan el ritmo de la escuela.

Ella está desesperada por no poder relacionarse con sus hijos con normalidad. No poder arroparlos y darles la seguridad, estabilidad emocional y el amor que antes les daba.

Nita ruega que su caso sea investigado de forma adecuada y señala que no es un caso aislado.

  • Una mamá de cuatro hijos, reclama que en la provincia de Cádiz los servicios sociales se llevan a la hija mayor del colegio. Luego acuden a casa del familiar donde se encontraban los otros tres pequeños y también se los llevan. No hubo ninguna orden judicial. Y a ella la detienen por un supuesto golpe infligido a la hija mayor.

Esta madre explica que la hija tiene un problema de celos hacia los hermanos. La cría culpa a sus pequeños de cualquier cosa. Y señala que la hija, en realidad, es una niña y no entiende la repercusión que conlleva todo lo que ha hecho.

Ella denuncia que Servicios Sociales se limita a decirle que reconozca el maltrato y la amenazan con que si no lo hace darán a los niños en adopción permanentemente, y nunca los volverá a ver.

Esta mujer se encuentra a la espera de dos juicios, uno penal y el otro civil. Señala que en algún informe se alega que los menores van sucios el día que los servicios sociales se los llevan. Dice que está falseado, pues los pequeños estaban merendando con chocolate y eso no lo mencionan. Y si bien hay una diligencia de alejamiento provisional hacia la niña mayor, hacia los pequeños no pone nada. Aun así, sin pruebas la separan de todos sus hijos.

Terminamos con un padre

Es un padre afectado por el falso desamparo hacia sus dos hijos pequeños. Este es un caso en el que ha intervenido la Diputación Foral de Gipuzkoa.

Él pertenece a la ASOCIACIÓN ADENI de Madrid y habla en nombre de miles de familias afectadas en todo el país.

Manifiesta que muchos de los casos están judicializados y otros a la espera de sentencia. Señala, todo está organizado de manera que la justicia apenas falla a favor de las familias y son muy pocos los afectados que recuperan la tutela de los hijos. Reclama que las administraciones, por lo general, no evalúan a los padres ni ayudan a que los menores vuelvan con sus familias, que es lo estipulado.

Confirma que tienen demasiadas pruebas en favor de los afectados, pero no son escuchados. Apunta que el gran problema es que se hacen negocios millonarios a costa de sus hijos y es algo que pueden demostrar.

Considera que no es de justicia que un asistente social, bajo su visión personal y subjetiva, decida retirar custodias sin pruebas que lo respalden. Solicita cualquier ayuda y firmas para cambiar la ley que permite este tipo de actos.

Por eso pide mucha difusión y apoyo social. Recuerda que, bajo todos esos criterios, cualquier familia está en riesgo de ser apartada de sus hijos por decisiones administrativas y arbitrarias.

Por  @dalila_sin

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