La Ley Orgánica 3/2007; del 22 de marzo para la igualdad efectiva entre mujeres y hombres ha cumplido diez años. Su objetivo es alcanzar la igualdad real entre sexos y la eliminación de toda discriminación por razón de sexo. Una Ley que reconoce a todas las personas los derechos derivados del principio de igualdad de trato y obliga, a toda persona física y jurídica que se encuentre o actúe en España independientemente de su nacionalidad.
El miércoles pasado tuve el placer de escuchar a Soledad Murillo (Madrid 1956), una de las madres de esta Ley. Su discurso se centró en el ámbito laboral.
Referente a este ámbito la Ley ha establecido la creación de un Plan Estratégico de Igualdad de oportunidades (implantación de Planes de Igualdad en las empresas, medidas específicas para prevenir el acoso sexual y por razón de sexo, fomentar la corresponsabilidad entre hombres y mujeres, etc…)
Soledad Murillo afirma que la Ley de Igualdad crea problemas cuando quiere pasar de teórica a efectiva. Nos explicó que uno de los retos de la Ley era el uso del tiempo, porque el tiempo es el gran capital del sistema capitalista. Se contrata tiempo, no talento. Así el acceso al trabajo remunerado es más sencillo para los hombres. ¿Qué sucede con el tiempo de las mujeres?
Desde siempre las mujeres hemos sido consideradas como un “colectivo” con especial dificultad a la hora de acceder al mundo laboral, y no como mujeres que aportan tiempo. El tiempo de las mujeres es donación, no aporte y ya sabemos que “quien no aporta no exige”.
No podemos olvidar que el trabajo doméstico sostiene al trabajo público, por lo tanto afirmar que las mujeres cuidadoras son las que tienen más dificultad es una malversación del lenguaje, que tiene el poder de hacer o no visible una situación, o darle la importancia que se le debe porque como bien dijo Murillo: “Como se habla se siente”.
La disponibilidad absoluta de las mujeres y la ausencia de los hombres marcan pautas de poder. Los hombres son contratados porque están liberados de las tareas de cuidados sean o no aptos. Limitar el acceso al trabajo remunerado a la disponibilidad hace más vulnerables a las mujeres que sufren las consecuencias directas de una sociedad vertical donde los hombres tienen el poder porque tienen el tiempo.
También hemos de entender que la Igualdad no es un asunto de mujeres (Murillo define esto como una malversación de significados) sino un acto de voluntad política, que consiste en tratar a todas las personas con respeto y darles las mismas oportunidades. Para conseguirlo, hay que fomentar la responsabilidad y no la conciliación. Hay que separar el vínculo entre mujer y cuidados e involucrar a los hombres, algo que ya se ha conseguido en países nórdicos, donde se considera una vergüenza que un padre no se dedique a cuidar a sus hijas e hijos.
Entendemos, pues la importancia de hacer políticas que fomenten la igualdad real entre mujeres y hombres, entendiendo las cuotas como representación.
Cito a Murillo en una entrevista que le hicieron desde Noticias de Navarra:
“En España, a nivel gubernamental ha sido un auténtico retroceso porque hemos tenido un Gobierno muy sádico, especialmente con las mujeres y con las ayudas a la dependencia. Esto ha provocado que España retroceda de la quinta posición a la veinte en materia de igualdad a nivel europeo.En esta legislatura se ha retrocedido claramente en materia de igualdad. Se está perdiendo la posición que se había conseguido. Esto es tan claro que la igualdad ya no tiene un ministerio propio, sino que se enmarca dentro del de Sanidad. De esta forma, y con la excusa de la igualdad de oportunidades, Cáritas y Cruz Roja pueden recibir subvenciones de este ministerio, al igual que organizaciones que promueven la igualdad, cuando ya reciben partidas de otros ministerios como el de Trabajo. También, la igualdad se une muchas veces a la familia, cuando las cuestiones correspondientes a la familia deben ir en Bienestar Social. En eso destaca también la Ley de Igualdad de Navarra, que asigna todo lo relacionado a la igualdad al Instituto Navarro de la Igualdad. La familia no es sólo cosa de mujeres, sino que es de hombres y mujeres que tienen proyecto de tener hijos. Además, las nuevas paternidades y masculinidades muestran sus deseos de querer hacerse cargo de sus hijos e hijas. Estamos en un tiempo en que las parejas comparten las responsabilidades y se deben dar facilidades para que se comparta».
Fuentes: http://www.noticiasdenavarra.com/2016/06/12/sociedad/navarra/soledad-murillo-la-igualdad-crea-problemas-cuando-quiere-pasar-de-teorica-a-efectiva
http://www.aeropuertodebarcelona.net/index_archivos/documentos/descargas/tema_empleo/resumen_ley_3-2007.pdf
Por Inma Guillem, Co-administradora de Stop Vientres de Alquiler @StopSubrogacion
Puedes ayudarnos con 1 euro al mes para pagar los gastos del mantenimiento web uniéndote a nuestro grupo de Teaming aquí:
https://www.teaming.net/mujeresenluchaprograma-grupo